
Su sucesor es Quique Sánchez Flores.Abel se ha despedido de la siguiente forma:
Abel no ha querido tirar más “mierda” sobre el tejado Atlético, pero si ha querido dejar claro que ha trabajado hasta el último instante por el equipo “El que da todo lo que tiene no está obligado a más. Estamos siendo muy castigados y los resultados no están saliendo. La conciencia la tengo tranquila por haberlo intentado. El fútbol es caprichoso”.
“Quiero agradecer a la afición del Atlético de Madrid su apoyo desde que he llegado al banquillo. He estado muchas veces en este club, me he marchado y he vuelto, así que es una nueva ocasión en la que tengo que darle gracias a todos los empleados, a los jugadores, que lo han intentado, pero no ha salido, y a la entidad, por haber confiado en mí. Le deseo toda la suerte del mundo a la entidad porque en cuanto me levante de esta silla, yo soy un rojiblanco más y espero que el equipo vaya para arriba”.
Sus sustitutos, Quique Sanchez Flores o Spalletti, este último casi descartado ya que prefiere esperar a una mejor oportunidad.