Chelsea y Manchester volvieron a quedar empatados tras 90 minutos de juego. Como en la final de la Champions del año pasado. El duelo por excelencia del fútbol inglés no defraudó a los aficionados que vibraron con un apasionante choque.
Ambos entrenadores apostaron por un partido muy en serio, y quedó demostrado enseguida con los dos equipos metidos en el partido, mucha agresividad y evitando fallos defensivos. El encuentro culminaría con varios lesionados, desde Deco antes de comenzar el encuentro hasta Van der Sar, que tuvo que ser sustituido por el portero suplente del Manchester.
Los 'red devils' se adelantaron en el marcador gracias a un gol de Park que aprovechó un regalo de Cech al no blocar un disparo de Berbatov. Los 'blues' comenzaron el asedio a la portería del Manchester, pero sus delanteros no tenían el día bueno. Ferguson decidió echar el equipo adelante en la segunda mitad y jugó con tres puntas tras la reaparición de Cristiano Ronaldo en partido de Premier League. Los de Scolari se vieron obligados a defender mejor, aunque seguían atacando por todos los medios la portería contraria.
Finalmente, el acoso del Chelsea iba a dar sus frutos a balón parado. El Manchester defendió mal una falta botada por Obi Mikel y rematada por Kalou ante las dudas de Kuszczak. Luego, ni Cristiano ni Berbatov ni Drogba lograron romper un empate entre los dos favoritos de la Premier