
Genoa – Inter: El estadio Luigi Ferraris había visto caer al conjunto de Mourinho hacía tan sólo unas semanas.
Se presagiaba un segundo tropezón ante un Genoa que a pesar de las sensibles bajas de este verano, se ha remodelado de forma magnífica.
Pero se equivocó el equipo de Gasperini, que le abrió el camino al Inter desde el minuto 1. Se planteó un partido de ida y vuelta, de llegadas constantes y de ritmo frenético. En esa clase de batalles este Inter se encuentra en su salsa, porque tiene todos los espacios que quiere. Tanto para sus delanteros como para los llegadores de segunda línea, que son su arma más peligrosa. Sin Diego Milito y sin Eto’o, Mourinho aprovechó para colarnos la titularidad de Suazo. El delantero hondureño se quedó en el banquillo los 90 minutos y fue Balotelli el escogido para desequilibrar. La lió, tanto positiva como negativamente, lo que en el cómputo global significó la goleada del Inter.
Sunderland – Liverpool: Me pregunto que le debe estar pasando por la cabeza a ese pequeño red que ha visto como su propio globo ha regalado los 3 puntos al equipo de Steve Bruce. ¡Imaginad que la Premier se decidiera por esos puntitos! Se equivocó Michael Jones, el árbitro del encuentro, en dar por válido un tanto que nunca debió subir al marcador. Un error que no puede ser pasado por alto. Se puede permitir la equivocación por no ver una acción o por no acertar al indicarla, pero este fallo es de concepto, es de no saberse las reglas del juego. De todas formas, el Liverpool no mereció mucho más que la derrota. El centro del campo que se inventó Benítez no convenció lo más mínimo y sólo Benayoun creó algún desconcierto en la zaga de los Black Cats.
Nürnberg – Hertha: Si había un momento para reaccionar, ese era el idóneo. El conjunto capitalino, del que hablamos hace un par de semanas, se hunde aún más en la tabla perdiendo contra uno de los peores equipos del campeonato. La contundencia del marcador refleja lo sucedido en el terreno de juego. Apostaba por la victoria del Hertha este fin de semana. Tras la marcha de Favre se perdió contra el Hamburgo, cosa bastante lógica. Pero después de la primera toma de contacto esta era la semana para reaccionar. Más sabiendo que en la próxima te visita el Wolfsburgo, que por mucha Champions que tenga entre semana, será un rival durísimo. He querido ver un amplio resumen del partido de Nürnberg para saber qué le había pasado al conjunto berlinés. Pues bien, las conclusiones que haya podido sacar son muy negativas. Friedhelm Funkel podría ir despidiéndose de la Europa League, poniendo si hace falta el equipo juvenil, y centrarse en sacar a su equipo del descenso.