Fútbol Internacional — 15 de octubre de 2009 | 8:25

Lippi se enfada con la afición italiana tras remontar a Chipre

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El seleccionador italiano se mostró ayer furioso con la actitud de la grada en el partido de la azurra frente a Chipre.

Los italianos, que remontaron dos goles para terminar ganando en los últimos minutos gracias a Gilardino, silbaron al equipo y corearon los nombres de los que Lippi no alineó en el once.

Italia no tiene un partido sin contratiempos. Si la clasificación matemática les llegó el sábado con un punto que consiguieron sobre el minuto 90, el partido de Chipe ha levantado casi más polémica. Y eso que Italia no se jugaba nada.

Por ello Lippi alineó a los no habituales frente a la débil selección chipriota, que se puso por delante en el marcador gracias a los goles de Okkas y Michail. Los parmesanos se sintieron estafados por la marcha del encuentro y comenzaron a silbar a los jugadores y corear los nombres de los que no estaban sobre el campo.

Lippi se enfadó mucho. El seleccionador campeón del mundo aseguró tras el partido a la prensa que estaba “furioso”. “Por si alguien lo ha olvidado, los que estaban sobre el césped son los vigentes campeones del mundo”, aseguraba. “Es una falta de respeto a todos estos buenos futbolistas que ante un problema en el marcador han sabido solventarlo y darle la vuelta”, remarca el italiano.

Y es que el grueso del equipo lo formaban futbolistas que pocas veces son titulares. Marchetti; Santon, Cannavaro, Gamberini, Bocchetti; Pepe, D”Agostino, Gattuso; Rossi, Quagliarella; y Gilardino formaron un once con el que Lippi quiso probar a varios jugadores. “Prometí hacer cambios tras conseguir el billete y cambié a los 11 jugadores ¿Cuándo ha hecho eso un entrenador?”, se pregunta Lippi.

Al final, Chipre se vio superada por la solvencia italiana. Sobre todo, gracias a Alberto Gilardino, héroe en la propia ciudad de Parma durante tres temporadas, que hizo un hat-trick en menos de 20 minutos para darle la vuelta al partido. Italia sigue siendo Italia.

 

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