Mundial Brasil 2014 — 19 de junio de 2014 | 0:00

España abdica en Maracaná

La selección española naufraga ante Chile (0-2) y cierra de la peor forma posible el ciclo más brillante de toda su historia en Brasil

Un texto de

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Seis años son una eternidad en el fútbol, increíble lo conseguido por una España que llegó a enamorar al resto del mundo con su juego exquisito, pieza central de una filosofía admirable que conquistó dos Eurocopas, un Mundial, y colocó a esta selección por derecho propio entre las mejores de toda la historia, al nivel de la Brasil de Pelé o la extraordinaria Alemania de los setenta con Franz Beckenbauer y Gerd Müller. La estrella de España se apagó de la peor forma posible en Brasil, en un escenario mítico como Maracaná, después de otro ridículo ante Chile (0-2), sin noticias de su juego más reconocible, desaparecidos sus mejores jugadores, fundida desde el minuto uno. España vuelve a ser mortal.

La Francia de Zinedine Zidane, la misma que levantó una Copa del Mundo y una Eurocopa, murió en el Mundial de Corea y Japón sin lograr marcar un solo gol. Ocho años después, en Sudáfrica, Italia se despedía de su corona con un batacazo mayúsculo en la primera fase, incapaz siquiera de superar a la débil Nueva Zelanda. Ahora le llega el turno a una España muy menor en Brasil, agotada físicamente y con errores gravísimos impropios de una campeona. Nunca hubo motivos para la esperanza de España, desarticulada en todas las líneas, que por ahora apenas ha marcado un gol desde el punto de penalti y ha encajado nada menos que siete. Ese balance retrata la enorme distancia de esta España con la versión que triunfó en Sudáfrica o la que venció con rotundidad en la pasada Eurocopa.

En Maracaná no hubo noticias de España, acongojada desde el minuto uno, impresionada por la fortaleza de una selección chilena que ya asustó al cantar el himno nacional. A los dos minutos de partido la otra “Roja”, pura furia, coraje, fuerza y también talento, ya había dispuesto de dos ocasiones clarísimas de gol. Los nervios en la defensa de España, retratada en el partido contra Holanda, eran evidentes. No funcionó el plan de Del Bosque, que mandó al banquillo a Xavi y Piqué para meter en el once a Javi Martínez y Pedro. Retoques menores para un equipo siempre en fuera de juego, que reclamaba a gritos una revolución mayor porque, entre otras cosas, los titulares llegaban agotadísimos al Mundial. El agotamiento general ya fue patente en la pasada Confederaciones, pero la larguísima temporada -nadie ha disputado tantos minutos como los españoles- ha sido la puntilla final porque los jugadores llevan un ritmo frenético desde hace tres años, prácticamente sin descanso.

Chile abrió el partido a los veinte minutos con una jugada de escuadra y cartabón que define el espíritu de la selección de Claudio Borghi y retrató a España, descolocadísima su defensa ante la velocidad del ataque chileno que definió a la perfección Vargas. La cara de Xavi en el banquillo era un poema, desnortada por completo la selección de Del Bosque, incapaz de tomar el mando del partido por las continuas imprecisiones en el centro del campo y la nula movilidad en ataque. Andrés Iniesta fue de los pocos que intentó coger el timón, pero tampoco fue la noche del héroe de Johannesburgo.

El gol de Vargas hundió todavía más a una España sin frescura, sin chispa ni ánimos, que se llevó un sopapo brutal antes del descanso con el gol de Aránguiz. Volvió a fallar clamorosamente Casillas, desangelado en Brasil, que regaló con sus puños un balón que tampoco acertó a taponar la defensa, lentísima en estos dos encuentros. El tanto confirmó a una España sin autoestima que su ciclo iba a acabar esa misma noche en Maracaná.

Los errores volvieron a convertirse en el leitmotiv de España en la segunda mitad, que si mejoró algo fue por la incorporación de Koke en el centro del campo. No llegó para recortar distancias, y eso que Busquets tuvo una ocasión inmejorable después de una tijera de Diego Costa, otra vez discretísimo, dentro del área. Chile manejó a su antojo el partido hasta el final, e incluso estuvo cerca de ampliar un marcador que ya es dolorosísimo para la ya destronada campeona. «Queremos pedir perdón a la gente, somos los primeros responsables», resumió Casillas tras el pitido final. Los héroes de España vuelven a ser mortales.

Ficha técnica

España: Casillas; Azpilicueta, Javi Martínez, Sergio Ramos, Jordi Alba; Xabi Alonso (Koke, m. 46), Busquets; Pedro (Cazorla, m. 76), Silva, Iniesta; y Diego Costa (Fernando Torres, m. 69).

Chile: Claudio Bravo; Isla, Silva, Medel, Jara, Mena; Aranguiz (Felipe Gutiérrez, m. 69), Díaz; Alexis, Vidal (Carmona, m. 87) y Vargas (Valdivia, m. 86).

Goles: 0-1, m. 20: Vargas. 0-2, m. 43: Charles Aranguiz.

Árbitro: Mark W. Geiger (Estados Unidos). Amonestó a los chilenos Vidal y Medel y al español Xabi Alonso.

Incidencias: partido correspondiente a la segunda jornada del grupo B del Mundial de Brasil 2014, disputado en el estadio Maracaná ante 74.374 espectadores, 30.000 de ellos chilenos. Lleno.

Víctor Pérez

Víctor Pérez es periodista. Licenciado en Periodismo y Comunicación Audiovisual por la Universidad Carlos III, fundó en 2001 FIFA-Champions para organizar torneos internacionales online del popular videojuego de EA Sports. Desde 2003 trabaja en el desarrollo de esta web como plataforma de información deportiva, que ha llegado a tener su propia revista interactiva, radio online y foros con una comunidad de más de 10.000 miembros. Durante los últimos tres años ha trabajado en la sección de deportes del diario ABC

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