Un error fatal le ha costado al Barça dos puntos que tenía ganados a dos minutos del final. Hasta ese momento, el minuto 91 esperó Osasuna para asestar el golpe definitivo a los hombres de Guardiola, que una vez más sudaron sangre, sudor y lágrimas para dominar al conjunto ‘rojillo’. Hasta ese momento, hasta que Piqué introdujo el gol en su portería con la colaboración de Valdés, el Barça lo había conseguido.
Se habían adelantado los culés con otro gol, y ya lleva seis, de Keita bien avanzado la segunda mitad. El Barça supo madurar el partido y ponerse el mono de trabajo cuando tocó. El Osasuna fio toda su suerte a una presión agobiante que partía desde la propia línea de retaguardia azulgrana y así con un trabajo intachable llegaron fundidos a la segunda mitad.
Todo resultó muy previsible. Osasuna mordía y el Barça intentaba amansar a la fiera desde el inicio. No se cansaban los de Guardiola de tocar y tocar, aunque no llegaban ni siquiera a pasar de su propio campo con fluidez en los primeros minutos. Y a pesar de ello, la primera ocasión fue culé. En un arranque eléctrico de Messi, el argentino tuvo el primer gol apenas habían transcurridoscuarenta segundos. La ‘Pulga’ se plantó sólo ante Ricardo pero éste le aguantó bien y le detuvo el balón.
La réplica fue de Aranda, el más inspirado de los rojillos hoy, pero le falló siempre la puntería. Para entonces Xavi e Iniesta estaban completamente amorzadados y solo las cabalgadas de Ibrahimovic por los extremos abrían huecos invisibles para los hombres de Guardiola. Solo los vio Busquets, uno de los mejores culés hoy en el Reyno, que siempre buscó la espalda y las cosquillas rojillas. De hecho fue Ibra el que mandó el siguiente aviso a los vasallos del Reyno. Su latigazo en la jugada ensayada golpea en el brazo de Miguel Flaño pero el árbitro no quiso saber nada. Poco más en esta primera mitad, en la que Osasuna se vació simplemente para que el Barça no jugara.
El juego de sacrificio de los hombres de Camacho lo pagaron en la segunda mitad, cuando fundidos no pudieron seguir la velocidad de crucero del Barça. Los azulgrana comenzaron a poner cerco a la muralla rojilla. Abidal y Puyol abrían con asiduidad nuevas vías de penetración, mientras el ejército rojillo achicaba aguas. Messi e Iniesta comenzaron a asociarse,(hasta entonces habían pasado desapercibidos) y en una de esas todo encajó. Tras una larga jugada por la izquierda el balón llega hasta el costado opuesto donde Puyol aparece por sorpresa para poner un pase atrás que Keita hace bueno (0-1 min.72). Era el sexto gol del de Mali en la Liga y el Barça parecía que daba la puntilla definitiva a Osasuna.
Pero los hombres de Guardiola no remataron a un Osasuna moribundo. Tuvieron varios mano a mano. Messi, Ibra e incluso Xavi lamieron el gol, pero dejaron escapar con vida a Osasuna y el premio y la sorpresa saltó en el minuto 91, cuando el partido ya agonizaba. Camuñas centró sin esperanza y Piqué pintó el centro de verde. Su desafortunado despeje se coló en la portería azulgrana antes de tocar en Valdés. La batalla y el dominio quedaba en el aire, aunque el Barça sigue líder con un punto de ventaja sobre el Real Madrid.
Osasuna: Ricardo; Azpilicueta, Miguel Flaño, Josetxo, Monreal; Juanfran (Galán, m.82), Puñal (Rúper, m.77), Nekounam, Camuñas; Pandiani y Aranda (Masoud, m.70).
Barcelona: Valdés; Puyol, Piqué, Chygrynskiy (Márquez, m.61), Abidal; Xavi, Busquets, Keita; Messi, Ibrahimovic e Iniesta (Pedro, m.90).
Goles: 0-1, m.72: Keita. 1-1, m.93: Piqué, en propia puerta.