Según su representante, Elí Coimbra, “Marcos quiere continuar, pero quiere sentirse valorado. Le quedan dos años más, pero para él sería importante que el Villarreal diese un paso al frente para renovarle”, aseguró.
Y es que la oferta del Fenerbahçe, cercana a los 2,5 millones de euros por temporada, es muy tentadora: “Es mucho dinero, muchos millones. Quieren hacer un equipo potente y Aragonés sabe de lo que es capaz Marcos”.
El jugador vivió una situación similar cuando el Manchester UNited se interesó por él hace dos años. Aquella situación desembocó en la renovación del futbolista y la revisión de su contrato, exactamente lo mismo que se pretende ahora: “Hemos hablado con el Villarreal y he hecho entender que hablamos de un caso especial, porque es un jugador importante y pretendido por un conjunto con mucho dinero”, con lo que la situación pasaría por “renovar su contrato para mejorarlo y mantenerle tranquilo”, aseguró Coimbra.
La pelota está ahora en el tejado del Villarreal, que cuenta con la cláusula del futbolista de 35 millones de euros como aval para retenerlo en caso de no llegar a un acuerdo. A la espera de que finalmente llegue al club la supuesta oferta turca, el club valora la idoneidad de renovar a un jugador clave, pero de 32 años.