Webb Simpson, el sorprendente ganador del Abierto de Estados Unidos de golf, apenas se lo podía creer. El estadounidense, que se ha aupado hasta la quinta posición de la lista mundial disfrutaba de su minuto de gloria en una entrevista para la televisión con la copa bajo el brazo. Pero en ese preciso instante un aficionado se interpuso delante de la cámara y comenzó a imitar el sonido de un ave. Una imagen insólita que ya ha dado la vuelta al mundo y ante la que no pudo soltar una sonrisa Simpson, que se coloca tras su triunfo en San Francisco por detrás de Tiger Woods.
