Pol Gustems • Blog órbita gustems
Arriesgándome a entrar en debate cinéfilo entorno a Ben Stiller y Jennifer Aniston (Along came Polly), el derbi de la Cuenca del Rhur propició una aparición del calibre de una magnífica, alegre y desenfadada Rachel de Friends. Todo para cargarse un partido – o un hombre – que estaba plenamente decantado hacia otro resultado – mujer -.
Irregular o no, yo me quedo con el momento de Mohamed. Hago balance de riesgos y sí, me sale que no, la otra opción es más consistente. Pero a su vez, aburrida, monótona y sin alegría. Amigos, no sé vosotros pero yo me quedo con Polly.
El Borussia Dortmund tenía 0 posibilidades de ganar el partido en la media parte. El Schalke había imprimido un ritmo muy fuerte, había demostrado su teórica superioridad y Kuranyi había marcado el gol de su vida. Sin embargo, la cara del jugador egipcio saliendo en la segunda mitad dejaba un hueco a la esperanza. El resto del Borussia no quiso, pero Zidan cambió el partido él solito. Jürgen Klopp había dispuesto un once bastante anárquico, que protegía mucho la defensa pero incapacitaba cualquier tipo de contragolpe o creación propia de juego. El centro del campo con Kehl, Kringe, Sahin y Hajnal no trianguló nada y Frei era un islote arriba. De Boateng mejor no hablar, totalmente perdido en un encuentro dónde mereció la expulsión.
¿Con qué salió el Schalke? Pues con absolutamente todo. Trió atacante formado por Asamoah, Farfán y Kuranyi. Medular fortísima con Engelaar, Jones y Westermann. Sí, el que fuera lateral. Se ve que metía tantos goles que al final le subieron de posición. De todos modos, la alegría del centro del campo le duró poco a Westermann. La lesión de Mladen Krstajic – central – obligó la entrada de Halil Altintop – más pólvora – y el retroceso de Heiko a la defensa. Destacamos también a Rafinha y Kobiashvili, sobre todo a éste último. El lateral izquierdo de Georgia fue lo mejorcito de su equipo. Subió con mucho criterio por su banda y abasteció de centros a Kuranyi. ¿Qué faltó? Creación. Ese tipo de jugador que ordena el juego ofensivo del equipo. Faltó el Rakitic o el Lincoln de turno.
Así que con el golazo de Kuranyi – gracias Subotic por dar pasitos hacia atrás – sólo íbamos 1-0. Yes, along came Zidan. El partido siguió la misma tónica pero en ataque el Borussia tenía al menos una opción, balón al egipcio. ¡No había tirado en todo el partido el equipo de Dortmund! Además, creo que al final sólo lo hizo 2 veces. Zidan las 2, of course. La primera y ya en el minuto 80, tras fabricar una jugada para sus compañeros. No la aprovecharon, volvió a coger el balón y fusiló. La segunda fue un mano a mano que paró brillantemente Neuer.
En definitiva, ni uno ni otro logran un buen resultado para sus aspiraciones reales. Al Schalke le falta un puntito de calidad en la creación. Le falta Rakitic, porque en cuanto actitud, ponen todo lo que tienen. ¿Y Zidan? Ya tiene 27 años y no parece que nadie se decida a apostar realmente por él. Es irregular, cierto, pero aún no se le han dado 20 partidos seguidos en un buen equipo. Quizás, viendo como jugó ayer, esto cambie en Dortmund.